Molido de morchelas deshidratadas 500 gr
Verdadera magia para salsas y carnes
La morchella o morilla es un hongo exquisito y escaso por hallarse sólo en estado silvestre.
Su forma como un sombrero con celdas asemeja una colmena y posee un tallo grueso que se adhiere firmemente a la tierra.
La morchella es el segundo hongo más demandado por la alta gastronomía internacional después de la trufa. En Francia es considerada entre las cuatro setas más sabrosas de su cocina donde protagoniza platos clásicos como el filete en salsa o el pollo guisado al vino blanco.
Su sabor es una mezcla de avellana, madera y otros hongos que en definitiva la transforman en un ingrediente versátil que potencia diferentes tipos de carnes y salsas.
¿Cómo y en qué usarla?
Nosotros te ofrecemos morchella deshidratada, en dos formatos: molida y entera.
Las morchellas molidas puedes aplicarlas directamente en una salsa y dejarlas hervir hasta que la mezcla espese. En el caso de las enteras, debes remojarlas en agua caliente o caldo durante dos horas para lograr su rehidratación. Una vez listas, se lavan y se conserva el líquido de remojo -sin residuos- el cual se transforma en un sabroso aliño para cualquier preparación.
La forma cónica de este hongo lo transforma en una especie de esponja, ideal para hacer guisos como el de ternera, pollo cocotte, conejo a la cazadora, entre otros. O bien para darle un toque diferente a preparaciones de huevo como omelette, panqueques o simplemente revueltos.
Por poseer un sabor potente, la morchella acompaña bien las carnes rojas como vacuno, cerdo, cordero y todas las de caza. Para carnes blancas, te recomendamos combinar con conejo, pollo y pavo.
Si eres amante de los vegetales, mézclala con espárragos, habas, papas, brócolis o arvejas. Y si lo tuyo son los pescados, una salsa de morchella es la mejor amiga de un filete de salmón, turbo o corvina.
A pesar que el risotto es una especialidad italiana, la cocina francesa hizo suyo el risotto de morchella , una verdadera delicia. Un consejo: para hacerlo usa morchellas enteras y utiliza el líquido de remojo para cocinarlo.
El resultado es excepcional.
¿Dónde crece?
La morchella crece en suelos arenosos durante la primavera de climas templados. En Chile se encuentra en estado silvestre en localidades cordilleranas del Sur desde Talca hasta Punta Arenas. Expertos coinciden en que se reproduce en abundancia en superficies que vivieron incendios forestales recientes.
Es la especie vegetal que marca el renacer de la tierra.